Batman: Caballero Blanco
Sean Murphy, retened este nombre. Es el guionista y dibujante de esta miniserie sobre Batman y su «grandiosa» relación con el Joker.
Muchos diálogos y toneladas de dibujos se han estampado en celulosa para explicar distintos episodios de esta tóxica dependencia entre el murciélago y el payaso con Gotham de fondo.
Una de las mejores, sin lugar a dudas, es «Batman: El regreso del caballero oscuro» de Frank Miller sin menospreciar comicazos de la talla de «La broma asesina» de AlanMoore o «Batman: una muerte en la familia» de Jim Starlin.

En todos estos cómics, Batman y Joker suman momentos a su «matrimonio» violento y de dependencia enfermiza.
Uno no puede estar sin el otro.

Esta es la idea que siempre sobrevuela estas historias. ¿Existiría el Joker sin Batman? ¿Es Batman la solución o bien genera más maníacos de los que encierra?
En esta ocasión Murphy nos abre una nueva puerta a la relación destructiva entre estos pilares de Gotham. Batman se está desmadrando, la violencia empleada para erradicar el crimen está saliéndose de madre. Esa situación llevará al caballero oscuro a un episodio de extrema opresión al Joker que acabará sorprendiendo a todos como Jack Napier. ¿Cómo Jack consigue apartar al Joker? ¿Cómo reaccionará Bruce Wayne frente a ello? ¿Y la bat-familia? ¿Y Harley Quinn (alias pastelito)?

La historia es interesante y te mantiene en tensión durante toda su lectura. Los dibujos son EXCELENTES. Me encantan y encajan perfectamente con el ambiente de degradación y oscuridad que está sufriendo Bruce Wayne.
Muy, muy recomendable.